domingo, 14 de julio de 2013

¡Hola queridos lectores! Hoy es domingo de análisis, así que os traigo un sueño que tuve hace unas semanas para que deis vuestra opinión y me digáis que puede significar. Ayi ya ha expuesto su teoría. ¿Estáis de acuerdo con ella?


Ayi y yo salimos a dar una vuelta por Madrid como tantas otras veces, es lo que tiene ser de posición humilde, que lo de dar paseos es un plan recurrente. De repente nos adentramos en una cueva que tiene unos raíles en los que varios adolescentes están haciendo cola como si fuera el parque de atracciones. Y la atracción en cuestión es básicamente un tronco con ruedas en el que te tienes que tumbar y luego sale disparado a toda mecha por los raíles. (patente en marcha ¬¬)
No sé muy bien por qué a Ayi y a mí nos parece una genial idea lo de subir, así que ahí vamos como unas valientes y cada una monta en un tronco mortal de esos. El troncomóvil se pone en marcha y gritamos durante un rato hasta que aminora la velocidad (sí Ayi, lo siento, pero tú también gritas. Mis sueños, mis normas) Empezamos a pasar por una especie de centro comercial en el que solo hay establecimientos de comida extraña. Las dos empezamos a sentir hambre, nos apeamos de nuestros respectivos troncomóviles…y no vemos nada que podamos soportar comer. Vemos con aprensión que hay puestos de insectos y de carne rara…Hasta que me da por dejar a Ayi un poco atrás y aventurarme tras una esquina. Entonces con la misma ilusión que una niña el día de Reyes llamo a mi amiga.
-¡Ayi mira, mira!-cuando Ayi llega a mi lado se le ilumina la cara.
-¡Un Starbucks!- no es que seamos adolescentes snobs ni mucho menos, pero somos algo adictas a los frapuccinos de chocolate y ver uno de estos establecimientos entre tanta comida vomitable…
Corremos como locas hasta llegar al mostrador y pedimos bebida y comida, todo de chocolate.
Después de engullir todo a una velocidad propia de un sueño, salimos por una puertecilla y aparecemos en un parque oscuro, poco transitado, pero que por suerte contaba con una boca de metro, lo que prueba mi teoría de que en Madrid hay bocas de metro por todas partes. (Nuestra salida de escape habitual cuando nos perdemos por la capital). Y llegamos sanas y salvas a casa.

Analiza esto y dime que no es una llamada a gritos de uno de nuestros paseos por Madrid que hace tanto que no damos.

Y hasta aquí mis incoherencias mentales. Ahora vamos a leer que ha sacado Ayi en claro. Tanto si estáis de acuerdo con ella como si no, podéis opinar.

¡Aquí está Ayi! ¡Dispuesta a analizar todo lo que sea analizable y a demostrar que para esto no es necesario ser un psicoanalista consumado!
De todos modos, Lyra, no era necesario que me lo dieras ya medio analizado (lo digo por esa última frase) ¡Ten un poco más de confianza en mí! Yo solita podría haber llegado a esa conclusión.
En fin, veamos qué más puedo sacar de aquí.
Está claro que este sueño es una especie de prolongación del anterior en el que buscabas hacerte con modelitos para el verano. En este, ya vestida y divina de la muerte, estás buscando planes para las vacaciones.
Analicemos el primer párrafo ¿Una cueva con raíles y llena de adolescentes hacia una atracción? ¡Facilismo! Quieres que nos cojamos el metro y vayamos al parque de atracciones para pelear con un montón de críos en esas colas interminables ¿verdad?
Continuemos. Lo siguiente es un tanto incomprensible ¿Te sorprende que nos subamos a la atracción? ¡Pero sí ya habíamos hecho la cola! Pero sí que es interesante que tú te montes como una valiente... creo que tu inconsciente te está diciendo que la próxima vez que vayas a un parque tienes que subirte a todas las montañas rusas que veas ¡Es un deseo reprimido, claramente!
Si me permites un consejo, en lugar de patentar esta atracción el troncomovil (por cierto, míralo porque creo ese nombre ya esta pillado) igual deberías patentar ese nuevo concepto de complejo de ocio: el parque de atracciones con centro comercial incorporado. Con starbucks ¡Claro! Que seguro que lo petas. Pero evita incluir lo de los puestos de comida con insectos y carne en mal estado que luego nos vienen las denuncias.
¿Por qué había un parque oscuro a la salida del starbucks? ¿No sería un parking? Las palabras se parecen... de aquí lo único que he sacado en claro es que las bocas de metro (que ciertamente crecen como setas por Madrid) parecen haberse convertido en elementos de seguridad para ti. No soy tan experta en la simbología freudiana como tú, querida Lyra, pero yo buscaría en tu diccionario a ver qué significa.
Al menos tenemos un final feliz.
Hasta aquí mis dotes de interpretación ¡Espero que te haya ayudado!

Gracias por tu interpretación Ayi, siento decirte que mi genial atracción del troncomóvil no oculta ningún deseo reprimido sobre querer subirme a una de esas abobinables atracciones a las que pretendes que me suba. La lanzadera fue mi límite. 
Para todos los demás os doy vía libre para comentar. ¡Hasta la próxima!

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